Día: 18 de diciembre de 2017

  • Vendetta facial

    Vendetta facial

    Siempre exigía la corrida en la cara y aunque casi ningún tío se negaba a dársela, alguno se quejaba por no poder acabar nunca en otro lado.

    Él nunca contó el motivo a ninguno de sus amantes, siempre les decía que era porque le gustaba sentir el semen en la cara, pero la verdadera razón de esas corridas faciales era el poder joder a su madre, esa que tanto le había torturado por ser gay y a la que ahora le acercaba restos de corrida de hombre a la cara cada vez que la besaba en modo de saludo después de haber tenido una buena ración de sexo homosexual.

     

    Juanma Vázquez

  • Pollas vs Chochos

    Pollas vs Chochos

    Para empezar este artículo tengo que hacerlo con un gran GRACIAS, por vuestras aportaciones y dibujos de pollas y coños. Aunque a partir de ahora suene seria y penséis que os doy caña quiero que quede claro que todo lo haré desde el más profundo agradecimiento.

    Dicho esto, viene la bronca, ¿qué os pasa con los coños, COÑO? ¿Por qué salen perdiendo los genitales femeninos? ¿tan difícil es dibujar un coño? No he visto tantas complicaciones y excusas cuando os pedimos que dibujarais una polla, eso lo hacéis sin pensar, casi no tenéis que mirar el papel, es que se mueve el boli solo, pero ¡ay amigos! cuando tenemos que dibujar un buen chochete, todo son nervios, dudas, borrones y líneas que no llevan a ninguna parte.

    He de decir en vuestra defensa, que como casi siempre, parte de esta culpa es de nuestra socialización. Hemos nacido en un mundo donde las pollas tienen un icono claro, simbólico y connotado de una forma tan positiva que es lo primero que nos sale cuando alguien nos dice: dibuja algo. En cambio, los coños sobreviven velados de tabús y connotaciones negativas como ya expliqué en el artículo de Coño’s Project, y eso se nota hasta a la hora de dibujar.

    Además del desigual número de dibujos recibidos de uno y otro lado hemos sacado algunas conclusiones de este pequeño estudio que nos habéis ayudado a construir:

    Con respecto a las pollas:

    • La inmensa mayoría están empalmadas y descapulladas (y eso que no vivimos en un país con tradición circuncidadora)
    • Los trazos son sencillos y certeros
    • Casi ningún dibujo representa una polla real si no un concepto
    • Casi nadie nos ha pintado una polla enmarcada en su contexto corporal
    • Transmiten fuerza y poder

    Con respecto a los coños:

    • Se suelen enmarcar en el cuerpo, pintando todas las partes de alrededor
    • Son dibujos complejos
    • No dan para tanta commedia
    • Hay partes confusas o incompletas
    • Transmiten una idea de misterio y sacralidad

    Tras este análisis no nos ha quedado otra que embarcarnos en la maravillosa aventura de intentar crear un icono comparable al de la polla pero para los coños. Estamos trabajando en crear un dibujo simbólico que con unas pocas líneas represente a todas las personas que tenemos un clítoris, labios mayores y menores, uretra, vagina y horquilla. Es cierto que las mujeres tenemos un icono de las tetas, pero no es igual de potente ni igual de justo.

    Os mantendremos al tanto de los avances del proyecto y os agradecemos cualquier sugerencia o dibujo que nos enviéis a: sexoyloquesurjablog@gmail.com

    Azalí Macías

  • Entrevista a Pamela Palenciano

    Entrevista a Pamela Palenciano

    Estamos acostumbrad@s a escuchar a Pamela Palenciano hablando sobre violencia machista, desigualdad y patriarcado, pero en esta ocasión nos ha concedido el lujo de escucharla/leerla hablando sobre sexualidad y embarazo, y es igual de interesante y de impactante que su monólogo “No solo duelen los golpes”.

    ¿A que altura del embarazo la situación influye en la vida sexual?

    Yo he tenido sólo un embarazo. Mi embarazo fue muy deseado y muy buscado, nos quedamos embarazados en menos de un año.

    Yo soy madre de Lía, mi hija de corazón, a la que estoy cuidando desde los dos años. Cuando mi hija cumplió unos siete años, le dije a Iván que Lía me había hecho sentir algo que yo no me esperaba, porque yo siempre había dicho que nunca iba a ser madre biológica, pero me despertó el deseo de querer conocer esa etapa del embarazo.

    Mi embarazo fue muy deseado, muy abierto, muy currado previamente, por lo que a nivel sexual no tuve nunca una influencia de algo negativo. Nada como lo que dicen: es que estás embarazada y entonces no puede relaciones sexuales coitales porque como está la criatura ahí el pene le da en la cabeza… yo no tuve esa sensación nunca.

    En la mía no, pero sé de otras mujeres que han pasado momentos muy difíciles, hasta el punto de pensar que el embarazo es una enfermedad y no han tenido relaciones sexuales de ningún tipo durante el embarazo y la cuarenta, pero en mi caso, no he tenido ningún problema.

    ¿Es una cuestión física, psicológica o emocional?

    Yo creo que es una cuestión física, psicológica, emocional y hormonal, es todo para mí. El embarazo me movió todo, lo psicológico, lo emocional, lo físico, lo hormonal. Me vi más guapa que nunca, me vi más sexy que nunca, me encantaban mis uñas, mi pelo que se me puso super bonito y sedoso, la piel… yo disfruté mucho de mi embarazo, aunque sé que no es lo común. Mi parto fue una mierda, pero mi embarazo fue la hostia, y me encantó toda la etapa. No tuve nauseas, no recuerdo malestar, de dolores… al revés, recuerdo todo como muy positivo y muy bonito

    ¿Cómo influyen los cambios hormonales en la libido? ¿y los físicos?

    A mí la libido me subió mogollón. Yo soy muy monógama y muy fiel con mi pareja, no me atraen todos los cuerpos y todos los seres a nivel sexual, aunque sí que veo a todo el mundo muy guapo y muy atrayente, pero a mi pareja cuando lo veía me ponía como una moto siempre. Tuve orgasmos increíbles durante mi embarazo.

    Me gustó mucho sentir esa libido, porque además tenía la oxitocina hasta arriba y tenía una sensación de amor en el cuerpo brutal y super bonita. Me influyó mucho y me encantó. Me volvería a quedar embarazada, pero como no quiero seguir criando porque ya tengo bastante no lo hago, pero la verdad es que fue la hostia.

    ¿Crees que hay suficiente información sobre este tema?

    No. Hay muy poca información sobre este tema, hay mucho tabú sobre el embarazo y la sexualidad y con el parto. Hay mucha información oculta todavía, yo siento que hay mucho poder. Yo recuerdo mucho poder en mí. Recuerdo poder en muchas cosas, poder de creatividad, de pensamiento; yo tuve ideas y razonamientos de entendimiento del mundo que JODER ¡qué lucidez te da estar embarazada!

    Creo que hay muy poca información, y la poca que hay la manejan mucho en el primer mundo. En otros países las mujeres no manejan el poder de la información, sí manejan la información, pero no el poder. Son mujeres que son de comunidades y pueblos: las parteras, las matronas, que manejan una información muy potente pero no saben cómo poder trasladarla al mundo porque no tienen el acceso al poder.

    A mí quien me apoyó muchísimo fue María Llopis que es todo un referente. Escribió un libro sobre maternidades subversivas, habla mucho sobre el sexo y el embarazo o el porno y el embarazo. Somos amigas, es un amor de mujer y me ayudó mucho, de hecho, fue mi doula: me acompañó durante cuatro sesiones antes de parir y me ayudó mucho, de verdad.

    ¿La información que has encontrado ha sido a través de amigas y familiares?

    Fue a través de amigas, y de amigas que yo considero familia. Como mi amiga Sandra que es una doula maravillosa, que hace acompañamiento a mujeres en el parto y en el postparto. Ella me pasó mucha información, a través de ella llegué a María Llopis.

    Siempre lo que he conocido ha sido a través de amigas, también es verdad que yo tengo amigas muy feministas, amigas muy conscientes del mundo y muy abiertas. Al final es una información que manejan y la pueden compartir. Es cierto que en mi familia de origen no había esta información, mi madre flipó cuando la conté todo esto.

    Mi madre me pasó información desde su conocimiento, de lo que había pasado con sus dos embarazos (el mío y el de mi hermana). Mi madre me transmitió también mucha paz y sosiego. Me ayudó a entender lo que me estaba pasando, qué me podía pasar. Trabajé mucho el tema de si la genética influía en si iba a tener un parto rápido. Hablé mucho con mi madre, de sus experiencias y de embarazos en los que ella había acompañado.

    A mí me gustó mucho la experiencia. Ahora hablo más de crianza que de embarazo, porque al final con las criaturas te enredas. Pero recuerdo mi embarazo como una etapa muy bonita. Me reí mucho. Me gustó esa lucidez y ese cambio hormonal en mí, pero sé que eso no es lo común, que también hay vivencias de embarazos terribles, de angustia, de dolor, de asco, de cansancio, también conozco esas malas experiencias lamentablemente.

    ¿Hay alguna ventaja sexual en el embarazo?

    La ventaja sexual en el embarazo es que no usas condón. Aunque como soy monógama y sé cómo estamos mi pareja y ya no usamos condón. Sé de otras personas que van a tener relaciones con gente que no conocen y se ponen el condón.

    Yo recuerdo, que, aunque con el preservativo también se disfruta, esa sensación de no tener que parar en ningún momento, que me gustó mucho.

    Por otro lado, me recomendaron hacer ejercicios los días antes del trabajo de parto. Mi ginecóloga te aconsejaba tener relaciones sexuales para ayudar a la dilatación y al movimiento pélvico. Así que dices, me lo recomiendan voy con todo y me lo pongo de tarea. Sí, fue para mí una ventaja.

    Además, yo sentía un placer que disfrutaba mucho, por las hormonas o por lo que fuera. Eso es una ventaja, sentir el orgasmo en tres dimensiones, me moló mucho.

    ¿Qué te hizo falta que te contaran y que nadie lo hizo?

    Me contaron muchas cosas, tuve información de todos los lados… pero a mí me hubiera gustado más que me hubieran remarcado lo de seguir mi intuición, sobre todo en el parto, que cuando yo dije hasta aquí fuera hasta aquí, por más que la ginecóloga, una doula o mi propia pareja y mi propia madre me dijeran: vamos a intentar tal cosa…

    En el momento del parto, como estás ahí que te duele…. No, en ese momento si ella dice que puede seguir sigue y si ella te dice que quiere la cesárea es por algo. Hay que confiar más en las mujeres en ese momento, porque no estamos exagerando, porque cada una sabe sus límites y eso me faltó. Me lo contaron, pero me faltó que me lo remarcaran más. Yo ahora miro hacia atrás y pienso: si hubiera hecho caso a mi intuición me hubiera ahorrado mucho sufrimiento en las muchas horas que tuve de parto.

    Yo tuve una época en la que quería hacerme doula, aunque lo he ido dejando porque sigo con el teatro. Las que hemos parido, tenemos que estudiar y revisarnos algunas cosas porque tenemos mucha capacidad de acompañar a otras porque ya has pasado por ahí. Al final, el ser experta en algo es tener experiencia, y cuando la has tenido puedes hablar de eso.

    ¿Qué le contarías a alguien que se acaba de quedar embarazada?

    Depende de cómo se haya quedado embarazada, porque no le puedo decir lo mismo a una tía que lo ha buscado mucho y que es un embarazo súper deseado que a alguien que se ha quedado y no quería, son cosas muy distintas, porque no sé si se lo van a vivir igual. Puede ser que sí, que luego la cosa fluye y piensas: no quería, pero ¡qué pasada!

    Yo les diría lo de seguir su intuición, que se dejaran llevar por esas cosas que son muy instintivas. Hay un instinto ahí que a mí se me asemeja con lo animal, con lo primario. Algo que te dice muchas cosas, al final es la intuición que tú manejas cuando no estás embarazada también. Esa intuición humana, en el embarazo a las mujeres se nos sube el volumen y es muy fuerte. Por eso yo le diría: hazle caso a tu intuición y disfruta todo lo que puedas y vívetelo cómo quieras. Si te lo quieres vivir mal de puta madre, si quieres vivir 9 meses en la queja, en el sufrimiento y en el dolor de puta madre. Es muy legítimo. Tampoco te estoy hablando de un embarazo happy happy para todas. Cada una que se lo viva como quiera y como pueda, porque hay muchas complicaciones en los embarazos también, muchas vivencias jodidas.

    No hay tanto poder, cuando te dicen: el poder está en ti, vívetelo bien, y hay veces que tienes que decir: lo estoy intentando y no puedo. No está todo el poder en mí, hay un contexto y unas circunstancias, hay una experiencia que no puedo vivir de otra manera.

    No te estoy diciendo con todas mis respuestas que haya que tener un embarazo happy happy. Así fue el que yo me viví y me gusta hablar de mi experiencia porque sé que tampoco hay muchas referencias positivas sobre esto, pero sé que hay otras experiencias que son terribles y no se puede vivir bien.

    Por eso, a cada mujer que se quede embarazada yo tendría algo que decirle en su singularidad. No les podría decir a todas lo mismo. Yo puedo contarles mi experiencia, pero se lo contaré diferente a unas que a otras para no influir, porque yo me acuerdo que estando embarazada todas las que lo habían estado tendían a contarme sus partos y sus embarazos y yo decía: no es momento de escuchar tanta información, porque te satura, te influye, te comes la cabeza después…

    Después del parto, ¿qué consecuencias has tenido? Físicas, emocionales, psicológicas, médicas.

    Yo tuve un parto muy chungo y fue lo que me trajo consecuencias, no mi embarazo. Hay mujeres que tienen un embarazo malísimo, pero luego un parto estupendo, pero a mí me pasó al revés.

    Tuve un parto muy malo porque la que fue mi ginecóloga que era amiga mía; hoy tengo nula relación con ella porque me dolió mucho que no me haya pedido perdón y haya reconocido que la ha cagado, no sólo conmigo, también con otras mujeres, llevándonos al límite, porque era muy de la idea del parto natural. Yo estoy de acuerdo con ese tipo de parto.

    Creo que hay cesáreas innecesarias, creo que la cesárea se inventó para una rapidez de los hombres, hay posturas del parto que se hicieron para el disfrute de los médicos, sobre todo médicos hombres… pero, creo que también la cesárea se inventó por algo, también hay mujeres que se han muerto en el parto natural, o sus criaturas.

    Mi parto fue muy largo, de muchas horas. Yo estaba muy cansada, no pude sostenerme de pie. El trabajo de parto es mucho para una persona. En mi singularidad, que me vivo las cosas muy intensas y le pongo mucho ahínco a cada emoción, es como que hubiera vivido el doble. Mi parto se llevó al límite, mi hijo se cagó dentro cuando llevaba 24 de parto; la pediatra dijo que no podíamos esperar mucho a que mi hijo naciera porque era peligroso, porque había meconio en la bolsa; pero la ginecóloga que me atendió no quería cesárea, decía que siguiéramos y mi hijo nació 4 horas después.

    Al final ella se asustó porque ya eran muchas horas, yo ya estaba dilatada de 10 cm, pero el niño estaba atascado y por más que yo empujara no salía. Al final fue una cesárea de urgencia y fea, todo con mucha prisa, un silencio en la sala raro, me tuvieron que dormir porque yo sentía… hay muchos interrogantes que tengo que nadie me ha explicado, tan solo un médico de El Salvador me hizo una hipótesis de lo que podía haber pasado.

    Reconozco que mi hijo y yo estuvimos muy cerca de la muerte. Reconozco que sufrí violencia obstétrica en los momentos más vulnerables de mi vida. Recuerdo parir en la postura que no quería parir, que era tumbada, pero no podía estar de pie por el cansancio. Cuando empujaba mi ginecóloga me gritó, supongo que, porque estaba nerviosa, pero yo le dije que, aunque había ido a preparación al parto y sabía lo que me pedía no podía por el agotamiento.

    Después de ESE parto he tenido consecuencias muy duras en mi vida. A nivel físico, volví a tener problemas de vaginismo un tiempo que ya había superado después de la violación de mi ex durante tantos años. Tuve muchos sueños, pesadillas. Tuve mucha ansiedad. Crecieron en mí miedos, porque fue muy dura la experiencia. Desarrollé muchos sentimientos de culpa, de porqué no puede pararlo antes de llegar al límite de las cosas. Ha tenido consecuencias para mí muy jodidas.

    Hoy en día estoy mejor porque he hecho muchas terapias para poder entender porqué me pasó esto, porqué mi hijo decidió venir así al mundo, porqué yo decidí parir así. Trato de entenderlo como he entendido porqué me enamoré de un maltratador con 12 años. Pero me jode porque me pilló adulta, feminista, supuestamente más autónoma y vuelvo a tener una experiencia de violencia que no puedo parar. Al final tienes que decir, no soy omnipotente y tengo que vivir lo que me corresponde a mi modo. Pero tengo una sensación de injusticia con mi parto porque no me gustó que fuera así, sobre todo porque no me lo esperaba.

    Con un médico hombre esperas frases estereotipadas. Pero, de repente, ver que alguien en quien has confiado 9 meses, con un acompañamiento super bonito que me hizo durante mi embarazo, con una relación muy íntima, ves que está todo el parto con el Whatsapp, diciéndome tú puedes tú puedes tú puedes, pero no me explicó porque era tan largo, qué iba a pasar…. Y en el momento más jodido para mí se pone a gritarme que lo estoy haciendo mal. Eso no es acompañar a alguien en un momento tan vulnerable como el parto. Por eso tuve secuelas muy jodidas, porque al tener tanta conciencia, también hay más conciencia de las secuelas.

    Mi madre vivió conmigo violencia obstétrica. Tenía 17 años y estaba en un hospital de monjas, y la monja la llamó puta mientras estaba dilatando, además mi madre estaba sola mientras paría, porque no dejaban entrar a nadie. Yo estuve acompañada por mi amiga Andrea que me salvó y me ayudó mucho, mi pareja y mi doula que era una mujer chamana maravillosa.

    Se pueden tener consecuencias muy graves si no se acompaña en ese momento tan vulnerable de una mujer, porque es un momento muy bonito pero muy difícil. Es una simbiosis con la muerte y la vida, además es una simbiosis real porque hay mujeres y criaturas que se han muerto durante este momento y no es por gusto.

    ¿Crees que tu vida sexual será igual ahora que tienes un@ hij@?

    Mi vida sexual, después de haber explorado la maravilla del embarazo ha cambiado también a mejor. Aunque tuve la consecuencia del vaginismo, volví a tener miedo a la sexualidad y a que mi vagina se cerrara como se cerraba mi deseo, pero una vez que lo he ido superando he crecido mucho. He explorado un conocimiento introspectivo tan fuerte, tan lindo, tan bonito que ya no soy la misma porque mi sexualidad no es la misma.

    Para mí sí que el embarazo fue una experiencia de mi sexualidad. Esto es un tema muy tabú porque parece que el embarazo va a parte de la sexualidad, pero, yo sentí un placer amamantando a mi hijo brutal. Alguien puede decir que es incesto, pero no lo es. La erótica es una cosa y el placer sexual va en otra línea. No hay erótica de que vaya a tener sexo con mi hijo si no que he sentido placer dándole de mamar a mi hijo durante un año y medio, de hecho, para mí fue terrible tener que quitarle la teta, yo disfrutaba porque él disfrutaba y porque yo veía que le calmaba un montón de cosas solo con la teta.

    No se habla de que el embarazo es una experiencia de la sexualidad de las mujeres, y que la sexualidad no va a ser la misma, porque la experiencia de atraviesa el cuerpo. Si hay consciencia a la hora de atravesar toda esta etapa, tú ya después no eres la misma. A mí no me ha servido para mal, aunque mis consecuencias del parto fueran terribles, una vez que las he superado ha sido para mejor. Porque me conozco mucho más y porque he atravesado momentos muy intensos. Además, en mi caso con mi compañero de mi vida, que estuvo muy cerca de todo y nos ha posibilitado una apertura también mayor a muchas cosas.

    También sé que la mayoría de otras experiencias son mujeres que después del parto ya no viven el sexo igual. Sé que hay una mayoría de mujeres que renuncian al sexo después del parto, porque hay una historia ancestral en todo esto.

    Azalí Macías

    Imagen: http://www.huffingtonpost.es

  • Mi nueva amiga

    Mi nueva amiga

    Me estoy reconciliando con mi regla, así de simple y de bonito. Y es que, las mujeres, estamos expuestas desde la infancia a modelos de menstruación negativos. Todo lo que sabemos acerca de nuestra menstruación es que duele, es molesta, da asco, hay que mantenerla en secreto y todo tipo de mensajes negativos que hacen, que una compañera vital como esta se convierta en un supuesto castigo.

    Analizando esta situación, yo he tomado la difícil decisión de invertir esta relación, como ya hiciera con mi coño. A nivel social, nuestros propios chochos también son objeto de todo tipo de connotaciones negativas e impuras, y cuando descubres que son en realidad una parte esencial de tu cuerpo y aprendes a relacionarte con ella todo cambia y te proporciona una gran cantidad de momentos de bienestar y placer. Terminado este proceso, el siguiente paso lógico era invertir mis ideas también con mi menstruación, que no son si no un reflejo de lo anterior, y la mayor negación de la feminidad.

    Investigando un poco, descubrí, que existen casos documentados de niñas a las que se les ha proporcionado una educación positiva con respecto a su regla, hablándolas de ella como un signo de salud y un proceso necesario y equilibrante del cuerpo, naturalizándolo y creando ideas más sanas sobre el tema. El resultado es que ninguna de estas chicas desarrolló ningún tipo de dolor menstrual ni debilitamiento físico y mental durante sus reglas. Ante tal descubrimiento pensé que no era tarde para convertirme en una de ellas.

    A partir de entonces, he entrado en una nueva fase de relación conmigo misma. He repensado la regla como algo deseable, de hecho, he tenido épocas de no tener la regla durante 5 y 6 meses por problemas hormonales y os puedo asegurar que no es agradable. Tu cuerpo necesita renovarse y cumplir con los procesos y ciclos que nos conforman, y cuando esto no sucede es cuando realmente no te encuentras bien. Por lo que cada sangrado mensual es para mí toda una alegría.

    He aprendido a estar más conectada conmigo misma, y es durante los días menstruales cuando más lo consigo. He descubierto que esta parte del ciclo, lejos de ser un mal trago que hay que pasar, es en realidad una oportunidad enorme para disfrutar de ti misma. Cuando la sangre sale de mi coño para renovarme me siento más guapa, más equilibrada, en armonía conmigo y los demás y con ganas de comerme el mundo, porque soy una mujer sangrante y poderosa.

    Es complicado, pero si realmente te paras a pensar en tu regla y en cómo te hace sentir desprendiéndote de todo lo que la socialización te ha dicho que deberías sentir, descubres la cantidad de mentiras que nos atormentan sin motivos. Cuando he conseguido tener una relación totalmente sincera con mi yo menstruante me he olvidado de los dolores físicos (han pasado a ser una pequeña sensación de hinchazón que desaparece al segundo día) y mi estado de ánimo no es enfadada, ni triste, ni iracunda, al revés, me encuentro feliz, contenta y radiante.

    Queda mucho por autodescubrirnos, tenemos un duro trabajo de derribo tumbando todos los muros y cristales deformados que nos han puesto delante a la hora de mirarnos. Seamos más sinceros y más felices con nosotros y, por supuesto, con nuestras maravillosas reglas, que son el sumun de la feminidad y la salud, yo no pienso volver a la visión errónea nunca más.

    Azalí Macías

  • Quentin Guarrerastino

    Quentin Guarrerastino

    Amig@s guarreras hoy vengo a hablaros de una práctica que todos seguramente hayamos probado alguna vez y que de primeras puede que no os haya dejado muy buen sabor de boca, esta práctica no es otra que, grabarnos en video mientras follamos.

    Lo primero que quiero aclarar es que siempre que se grabe algo debe ser con el consentimiento de las dos personas, nada de grabar a traición, que hay mucho hij@ de puta suelt@ por ahí.

    Dicho esto, lo que os quiero decir hoy es que efectivamente, como habréis podido comprobar si os habéis grabado, las primeras sensaciones al ver dichos vídeos siempre son de «que patético todo». Vernos en pleno acto, con nuestros cuerpo vendidos al sexo, nuestros sentidos a disposición del sexo y nuestra mente ida por el sexo a veces es chocante. Pero os tengo que decir, que una vez pasada esa primera impresión en la que te dan ganas de borrarlo todo y olvidarte de ese mundo, se le empieza a coger el gusto y la fórmula a esto de grabar.

    Cierto es, que el menda que escribe estas líneas es un realizador titulado y frustrado y que evidentemente el mundo audiovisual me encanta. Pero aún así, este artículo no lo escribo desde mi postura de realizador. Sino de la de una persona que ha grabado vídeos que le han servido en el futuro y que a día de hoy todavía revisita de vez en cuando.

    Viendo tus vídeos de follador/a se aprende más de lo que parece y asumiendo lo que os he dicho antes, que todo lo que vas a ver y oír es de tu yo sexual y desinhibido, se puede sacar muchas cosas en claro de tus vídeos.

    Lo primero, puedes analizar con bastante precisión tus técnicas amorosas para así mejorarlas o cambiarlas si fuera necesario. Lo segundo, te conoces más a ti mismo, a tu yo sexual, ese que hace ruidos que ni imaginabas, el que pone los ojos en blanco o una cara de guarro que no se aguanta.

    Lo tercero, que revisitar el vídeo con el/la coprotagonista y echarse unas risas e incluso ponerse cachondos como perros en celo y acabar reproduciendo lo visto es muy divertido y gratificante.

    Y por último, además de todo lo anterior y algunas cosas más que se me escapan, es una fuente bastante potente de porno. A mi personalmente me encanta ver vídeos en los que salgo yo follando y siempre y cuando (repito, porque hay mucho flipado) la otra persona os autorice tener esos vídeos y demás, echarles un ojo para hacerse una buena paja es la ostia.

    En fin amigos, que lo que os vengo a decir es que os grabéis, os pongáis el vídeo en pareja y dejéis de lado esos diez minutos de vergüenza en los que quieres destruir el documento y no volver a hacer porno amateur jamás.

    Una vez hayáis conseguido esto os daréis cuenta de que el mundo del porno casero es infinito, morboso y sobre todo divertido. Buscad vuestros gustos, vuestros planos favoritos, vuestras posturas más vistosas en cámara y elaborar un documento que os haga sentiros orgullosos.

    Dadle caña, Quentins Guarrer@stinos.

     

    Imagen: https://www.estrelladigital.es/articulo/mundo/habitacion-gratis-dejas-grabar-practicando-sexo/20121004103654056415.html

    Juanma Vázquez

  • Con todo perdido

    Con todo perdido

    Tenía uno de esos días tontos en los que se sentía fea, sola y desdichada. No quería hablar con nadie, sólo meterse debajo de una manta y llorar, no valía para nada. Entonces se le vino a la mente aquella conversación sobre masturbación que había tenido unos días atrás con su amiga Lora, y con todo perdido, decidió darse una oportunidad. Aquella fue la primera vez que se tocó, la primera vez que tuvo un orgasmo, la primera vez que sonrió extasiada en años, la primera vez que invirtió su energía en hacerse bien y el día que descubrió el poder que tenía sobre ella misma.

     

    Azalí Macías

  • Entrevistas sobre sexualidad y embarazo

    Entrevistas sobre sexualidad y embarazo

    Hemos enviado una pequeña entrevista sobre sexualidad y embarazo a mujeres que han estado embarazadas alguna vez, para comprobar si sigue siendo un tema tabú y para crear un pequeño núcleo de información que ayude a dar visibilidad y normalizar este tema. Estas son las respuestas que nos han enviado estas mujeres tan valientes y naturales.

    Desde mi punto de vista, son absolutamente necesarias y deliciosas. He aprendido mucho entrevistándolas, y he sacado algunas conclusiones:

    • Las mujeres están muy dispuestas a hablar sobre su sexualidad durante la gestación, mucho más de lo que podría esperar y de una forma muy sana.
    • Cada una es un mundo, no hay ningún embarazo igual y, por lo tanto, cada una vive y cuenta su experiencia de una manera particular, lo que es muy enriquecedor.
    • Much@s no han entendido todavía que el embarazo es una parte muy íntima de la sexualidad. El temido tabú del incesto hace que muchas mujeres no hayan desligado erotismo y sexualidad y no hayan disfrutado de esta experiencia de ese modo.
    • Es crucial, que empecemos a generar círculos de información y apoyo entre mujeres para que el embarazo sea algo aún más enriquecedor.

    Que disfrutéis leyéndolas.

    1. ¿A que altura del embarazo la situación influye en la vida sexual?

    Pues la decadencia fue a partir del 7 mes. A mí me pasó q al principio era una euforia, estaba encantada me apetecía siempre. Después menos y ya a partir del 7 mes menos aún. El caso es q yo tuve el problema de la falsa ciática por lo q influía y mucho. Me dolía bastante.

    A que altura del embarazo, pues dependiendo del embarazo que tengas. Los míos fueron muy buenos, sin vómitos ni malestares en los primeros meses, por lo que todo fue normal hasta… supongo que el 7 u 8 mes que ya te pesa la tripa, te hinchas… y por lo general estas más cansada para todo, aparte que lo sientes más y se hace incómodo.

    Hacía el final, último semestre.

    Cuando se está de 8 meses.

    En mi caso influyó casi al principio, a partir del segundo mes el sangrado post coito nos asustó bastante. Luego la pesadez mía también influyó.

    1. ¿Es una cuestión física, psicológica o emocional?

    Más bien una mezcla. Cuanto más pasa tu cuerpo cambia y más pesas, pero también es psicológica, crees que estas más gorda que no atraes a tu pareja, que ya no eres sexy.

    Es una mezcla de las tres cuestiones, creo que no se puede elegir una. Física porque es incómodo porque te ahogas con la tripa, aguantas menos… psicológica porque involuntariamente empiezas con el modo mamá, al menos en mi caso, y me daba la impresión de que ya siendo el bebe grande y con poco espacio le haría daño o molestaría, y emocional porque ya solo me centraba en cómo estaba yo y mi hijo, y egoístamente no sentía nada más.

    Física.

    Es físico, te cuesta respirar, y se hace tedioso, no es por falta de ganas.

    A parte del tema físico, el aspecto psicológico nos cortaba mucho sobre todo a él al final del embarazo, el pensar que podía hacernos daño a mí o a los bebés.

    1. ¿Cómo influyen los cambios hormonales en la libido? ¿y los físicos?

    Lo q te decía los primeros dos trimestres muy alterada, sexualmente activa. Después un poco más pesada y más agotada así que todo influye.

    Los cambios hormonales, ¡la activan!  Lo dicho, como yo estaba activa y bien, tenía más ganas. Hasta el final.

    Mucho. Estás más cansada y te sientes menos guapa.

    En mi caso no me influyo para mal, creo que las ganas eran las mismas, el problema era que mi cabeza quería una cosa y mi cuerpo decía que parase.

    A mí no me influyeron durante el embarazo, al menos yo no noté cambio ni aumento, ni disminución de libido.

    1. ¿Crees que hay suficiente información sobre este tema?

    No y debería hay muchas falsas creencias, aunque sí te digo que mis contracciones empezaron después de hacer el amor.

    Si hay información suficiente, con las clases preparto, la matrona, foros en internet… revistas también, pero a mí me gustaban menos porque solo enseñan la parte idílica y bonita del embarazo. No son realistas.

    No, no se habla y hay mucho miedo por perder el bebé.

    No lo creo, aunque parezca que no, y pienso que aun estando en el siglo XXI, sigue siendo bastante tema tabú.

    Yo creo que sí.

    1. ¿La información que has encontrado ha sido a través de amigas y familiares?

    A través de internet.

    La información de amigas y familiares no me sirvió de nada. Son experiencias, y por lo tanto personales, y muchas vienen seguidas de… ay, ¿estas vomitando? ¡Pues eso es que va a ser niña! Anda si tienes la tripa a lo ancho (suponiendo que yo entendía a que se refería) y esos comentarios no me fueron naaada útiles en el embarazo. El peor, ¡que sea una horita corta! Aparte que cualquier comentario, consejo, etc, te lía más, sobre todo si eres primeriza. Por ello los evitaba.

    Amigas.

    La verdad es que no he buscado información de nada, iba escuchando las señales de mi cuerpo.

    No, aunque se habla del tema, pero yo siempre he confiado en opiniones del médico o matrona.

    1. ¿Hay alguna ventaja sexual en el embarazo?

    Lubricas mucho para evitar infecciones y eso viene genial. Además, descubres otras cuestiones y hasta posturas.

    Si, hay una ventaja. Lo sientes mas todo. Las sensaciones son más intensas, más despiertas, y todo tu cuerpo está más receptivo. Aparte que normalmente la pareja suele ser también más lento y cuidadoso, pensando que le puede hacer daño al bebé. En el embarazo por lo general siempre importas más tu 🙂

    Estás más sensual.

    Ventaja sexual… podría ser que da bastante morbo el pensarlo simplemente, ventaja como tal… no sabría decirte.

    Ventajas creo que pocas jeje.

    1. ¿Qué te hizo falta que te contaran y que nadie lo hizo?

    Me hubiera gustado que fueran más realistas con el dolor de las p….. contracciones. No sé porque la gente tiende a decirte que no es para tanto, que no es como en las películas… pues yo si las noté, todas y cada una de ellas, y eso que terminé en cesárea ¡en los 2!

    ¿Sobre el sexo en él embarazo? Ninguno, para mí no fue un impedimento para disfrutarlo.

    Del embarazo alguna cosa, del tema sexual creo que nada mi forma de pensar y de verlo desde siempre creo que ha hecho que sea bastante abierta de mente y no considero que me haya faltado información, aunque si me hubieran contado más bienvenido era por supuesto.

    No sabe/no contesta.

    1. ¿Qué le contarías a alguien que se acaba de quedar embarazada?

    Lo dicho. El embarazo en si no es bonito. Te sientes fea, se te cae el pelo, te pongas lo que te pongas nunca te sientes a gusto, aunque tus facciones y tu piel mejore y se redondee por el embarazo. El parto y el preparto duele, mucho. Lo mejor es prepararse a no tener falsas expectativas, las que nos inculca la sociedad, y solo llevarlo como mejor se pueda, y cualquier duda, a los profesionales.

    Que disfrutará igual que estaba haciendo.

    Que lo disfrute al máximo porque es lo mejor del mundo, tanto a nivel pareja, como a nivel propio.

    ¿Sobre sexo? Que mientras vaya todo bien, y le apetezca no se corte.

    9.Después del parto, ¿qué consecuencias has tenido? Físicas, emocionales, psicológicas, médicas.

    Como mi embarazo partió de un sobrepeso importante, físicamente mi cuerpo no se ha recuperado. Mi tripa y mis tetas cuelgan, mí piel no es lo que era… pero bueno, supongo que si me hubiera quedado embarazada en buen peso y forma física tendría menos de que quejarme jeje. Lo bueno es que yo no he tenido problemas de incontinencia, ni he notado diferencias en los músculos vaginales ni nada de eso.

    Pues que yo recuerde ninguna.

    Física me veía de culo sinceramente, me quedé con 27kg extra y parecía una mole, emocionales es un altibajo, super feliz de tener a mi niña entre mis brazos y momentos de decir no sé que hacer y me veo sola con un bebe indefenso, psicológicas no he tenido mucho cambio porque siempre he sido fuerte y aunque haya tenido momentos malos me he dicho que saldría por mí misma y así lo he hecho y médicas ninguna por suerte aunque fue una cesárea me recupere de ello muy bien y no he tenido más problema que el quitar las grapas en su día y ya.

    Físicas: hipotonia abdominal, que básicamente es que tengo la barriga blandurria después del embarazo, que si hubiera hecho ejercicio especifico antes, durante y después no la tendría. Estamos en ello. Psicológicas: durante alguna temporada, por lo anterior, no me sentía bien con mi cuerpo. Cosa que en el embarazo no pensaba, me veía estupenda con mi barrigón.

    1. ¿Crees que tu vida sexual será igual ahora que tienes un@ hij@?

    ¡No! Definitivamente no.… pero porque incluso en el acto, estas atenta a si lloran, si les pasa algo, si te escuchan… y si te vas a un hotel te da igual, porque igualmente no desconectas y tu mente esta con ellos en gran parte del tiempo.

    Es más complicado encontrar el momento porque hay una personita más en la vida de pareja, pero no tiene porque ser peor. Es distinta. Incluso a veces más divertida buscando momentos para estar a solas.

    ¡Pido ayuda para tener una vida sexual plena, la niña no nos deja, nos desesperamos y al final nos dormimos a la par que ella, quiero follar y no puedo! La vida sexual es lo que más me ha cambiado cuando podemos estamos reventados y cuando queremos la niña no nos deja…

    No está siendo igual, el cansancio, la atención constante a los niños, el colecho… limita mucho la vida sexual. Por lo menos a mí, prefiero descansar a follar. Pero hay que buscar huecos, si no, se resiente y mucho la pareja. No se puede estar siempre poniendo excusas, ni con «uno rapidito que estoy cansada».

    Azalí Macías